Creemos que, como terapeutas cristianos, somos llamados a discernir espiritualmente y a integrar la dimensión del espíritu humana como punto de partida para una transformación profunda del ser.
El objetivo de este curso es generar un espacio de aprendizaje, donde experimentemos primeramente nosotros, nuevos niveles de libertad y sanidad, pudiendo así acompañar a otros en este proceso.

“La Psicología de Dios” parece una frase contradictoria y un tanto incoherente. Sin embargo, cuando profundizamos en las Escrituras, vemos que no es así. En ella encontramos que los escritores bíblicos entendían el ser integral diseñado por Dios compuesto de espíritu, alma y cuerpo. Las evidencias bíblicas sobre cómo ellos podían diferenciar cada área del ser integral entendiéndolo como un ser inseparable son abrumadoras.